Mendoza reconoció la labor de docentes coformadores

Las Jornadas de Desarrollo Profesional Docente promovieron el encuentro e intercambio
entre supervisores, directivos, profesores del nivel superior y docentes coformadores.

Mendoza reconoció la labor de docentes coformadores, supervisores y directivos del
sistema educativo público, que participaron de las Jornadas de Desarrollo Profesional
Remunerado dictadas por Educación Superior. Un espacio de encuentro y construcción
colaborativa, al que asistieron más de 2.000 docentes, supervisores y directivos de toda la
provincia, que trabajan en las 550 escuelas asociadas, para acordar lineamientos, compartir
experiencias y ahondar en los procesos formativos que deben promover en los alumnos de
profesorados y carreras docentes que están realizando sus prácticas y residencias.

La coordinadora jurisdiccional del Observatorio de Prácticas Educativas y parte del equipo
técnico de la CGES, Elida Hodar, destacó que las jornadas de desarrollo profesional 2023
para coformadores se constituyeron como un hecho inédito en la formación de docentes,
porque si bien siempre hubo un vínculo entre los equipos de prácticas de los institutos
formadores y las escuelas asociadas, en esta oportunidad se dispuso de tiempos y espacios
compartidos con supervisores, directivos, profesores del nivel superior y docentes
coformadores, y se trabajó en forma conjunta en la mejora de la formación de los futuros
docentes de nuestra provincia.

La referente señaló que “Generar espacios de encuentro e intercambio, reconocidos
académica y económicamente, es fundamental si pretendemos una articulación real del
sistema. Sentarse a dialogar, acordar objetivos comunes, responsabilidades compartidas,
estrategias de acompañamiento y de evaluación de las prácticas de los futuros docentes no
es una tarea menor, requiere del compromiso de todos los actores del sistema, y la DGE ha
apoyado este pedido que veníamos haciendo desde las instituciones formadoras y las
escuelas asociadas a través de las jornadas de desarrollo profesional remuneradas”.

En relación al desarrollo y alcance de las jornadas, Hodar agregó: “han sido un insumo
fundamental para fomentar espacios de diálogo e intercambio entre las instituciones que
tenemos la responsabilidad de formar a los futuros docentes. Los resultados se hicieron
notar desde cada uno de los comentarios que nos llegan de docentes de distintos lugares
de la provincia, además de tener propuestas de mejora en la dinámica de las prácticas
profesionales de los estudiantes en vistas del ciclo lectivo 2024, con una mayor
participación de los y las docentes de escuelas asociadas”.

La labor de los docentes coformadores es fundamental, guiando y acompañando el proceso
de enseñanza, al trabajar en red junto a los equipos de Práctica Profesional de los Institutos
Superiores de Formación Docente (ISFD), y a supervisores y directivos de las escuelas
asociadas que tienen a su cargo el seguimiento individualizado de la formación en terreno
de los futuros docentes.

Las profesoras Silvia Adre, Antonela Sorichetti y Carla De Monte, de las Escuela Técnica 4-
113 “Ing. Jorge Barraquero”, expresaron que “Los co-formadores solíamos tener un rol
pasivo, quizá por desconocimiento, o por no tener las orientaciones específicas.
Acompañábamos en silencio. A partir de las jornadas realizadas con el instituto 9-007,
pudimos interiorizarnos sobre algunas cuestiones como el reglamento de prácticas, conocer
las funciones del coformador y de las instituciones secundarias o primarias. Desde este
ciclo pudimos acordar con las profesoras que están formando a docentes, qué aspectos son
importantes fortalecer y reconocer aquellos en los que se desempeñan muy bien”.

Al ser consultadas sobre la experiencia que les dejó participar en las Jornadas de Desarrollo
Profesional, destacaron que “La verdad es que fue valioso, nos motivó a trabajar a
conciencia, no por obligación. Colaborar como coformadores implica más atención,
compromiso y tiempo dedicado a un practicante, en él aula que nosotros conocemos y, aún
así, a veces es imprevisible. La experiencia de las jornadas ha sido un acierto que nos
permitió trabajar de modo conjunto como nunca antes habíamos trabajado”.